El exterior de la tienda
martes, 23 de febrero de 2010
miércoles, 17 de febrero de 2010
martes, 16 de febrero de 2010
Nuestras instalaciones
Una vez hecha la presentación y la historia de la pasteleria,lo siguiente es presentaros nuestras instalaciones,y como no podia ser de otro modo,lo primero que quiero mostraros es,LA TIENDA.
lunes, 1 de febrero de 2010
Haciendo un poco de Historia...
Me quiero presentar y daros a todos la Bienvenida. Hoy comienza un proyecto muy emocionante para mí,como es el contar el dia a dia de mi pasteleria que como leereis un poco más abajo está cargado de historia y tambien de historias.Ser todos más que bienvenidos.
Haciendo un poco de historia
Haciendo un poco de historia
La pastelería empieza allá por el año 1900, mi bisabuelo Salvador Martín de los Santos, deja su pueblo Toledano de Ocaña a la edad de 16 años para trabajar como aprendiz de Pastelería con uno de los mejores pasteleros de Madrid.
Al cabo de los años regresa a Ocaña, y se establece por su cuenta fundando la primera pastelería como Confitería “La Madrileña”
El Bisabuelo, Salvador Martín de los Santos y su mujer Mama Pura, tuvieron nueve hijos, y como el negocio iba bien, y estos necesitaban trabajar, deciden en 1932 abrir otra Confitería en Aranjuez, con el mismo nombre.
En el año 1936, con los dos negocios funcionando plenamente, estalla la guerra civil, y un bombardeo en Ocaña acaba con la vida de mi bisabuelo Salvador, ya que la bomba cayó en la pastelería, y dejo a su viuda y sus nueve hijos sin casa y sin uno de sus negocios. Se trasladan todos a la Confitería de Aranjuez, haciéndose cargo del negocio su hijo Mayor Vidal.
El local estaba ubicado en la Calle Stuart, cerca del Gran Teatro y una de las calles céntricas de Aranjuez y donde se desarrollaba toda la vida de la ciudad y es ahí es cuando la pastelería empieza a ganarse un nombre en Aranjuez.
La Pastelería de la Calle Stuart se cierra por jubilación de todos los hijos del Fundador, y se abre la nueva Confitería-Pastelería “La Madrileña” en 1976 en la calle Capitán, por mi padre José Luis Sánchez Martín de los Santos, nieto del Fundador y mi madre Francisca.
Hoy en día la pastelería, sigue funcionando con los mismos productos y la misma ilusión con la que abrió el abuelo Salvador hace casi 100 años.
Desde aquí quiero rendir mi Gran Homenaje a todos los que han trabajado, tanto en la Confitería de la Calle Stuart como la de la calle Capitán, en especial al Tío Vidal, al Tío Ángel, al Tío Salva, al Tío Jesús, a la Tía Pura, a todos los trabajadores y trabajadoras que han pasado por allí, a la familia y sobre todo a mí abuela Tomasa y a mis padres, siendo la Pastelería parte muy importante de su vida.
Desde aquí Gracias y Enhorabuena a todos.
Al cabo de los años regresa a Ocaña, y se establece por su cuenta fundando la primera pastelería como Confitería “La Madrileña”
El Bisabuelo, Salvador Martín de los Santos y su mujer Mama Pura, tuvieron nueve hijos, y como el negocio iba bien, y estos necesitaban trabajar, deciden en 1932 abrir otra Confitería en Aranjuez, con el mismo nombre.
En el año 1936, con los dos negocios funcionando plenamente, estalla la guerra civil, y un bombardeo en Ocaña acaba con la vida de mi bisabuelo Salvador, ya que la bomba cayó en la pastelería, y dejo a su viuda y sus nueve hijos sin casa y sin uno de sus negocios. Se trasladan todos a la Confitería de Aranjuez, haciéndose cargo del negocio su hijo Mayor Vidal.
El local estaba ubicado en la Calle Stuart, cerca del Gran Teatro y una de las calles céntricas de Aranjuez y donde se desarrollaba toda la vida de la ciudad y es ahí es cuando la pastelería empieza a ganarse un nombre en Aranjuez.
La Pastelería de la Calle Stuart se cierra por jubilación de todos los hijos del Fundador, y se abre la nueva Confitería-Pastelería “La Madrileña” en 1976 en la calle Capitán, por mi padre José Luis Sánchez Martín de los Santos, nieto del Fundador y mi madre Francisca.
Hoy en día la pastelería, sigue funcionando con los mismos productos y la misma ilusión con la que abrió el abuelo Salvador hace casi 100 años.
Desde aquí quiero rendir mi Gran Homenaje a todos los que han trabajado, tanto en la Confitería de la Calle Stuart como la de la calle Capitán, en especial al Tío Vidal, al Tío Ángel, al Tío Salva, al Tío Jesús, a la Tía Pura, a todos los trabajadores y trabajadoras que han pasado por allí, a la familia y sobre todo a mí abuela Tomasa y a mis padres, siendo la Pastelería parte muy importante de su vida.
Desde aquí Gracias y Enhorabuena a todos.
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